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Christoph Scherrer |
En el último día de sesiones de 2019 la Cámara de Representantes de Estados Unidos aprobó con los votos de la abrumadora mayoría de sus integrantes la Ley de Implementación del Acuerdo Estados Unidos-México-Canadá (USMCA, por sus siglas en inglés). El apoyo de los demócratas a este acuerdo de libre comercio que fue negociado por el gobierno de Trump, se debe sobre todo a que fueron capaces de obligar al gobierno a incluir mecanismos sin precedentes para el monitoreo y control de cumplimiento de la reforma del derecho laboral mexicano. Dichos mecanismos fueron recibidos con beneplácito por la AFL-CIO y la mayoría de los sindicatos estadounidenses. Ellos esperan que el fortalecimiento de los derechos de las trabajadoras y los trabajadores en México actúe como incentivo para que las empresas desistan de trasladar puestos de trabajo a México.
El arículo describe los déficits del derecho laboral de México, presenta un anexo referido a las reformas de la legislación laboral mexicanas que fueron negociadas por los representantes de Comercio de Trump y, aún más importante, detalla los mecanismos para garantizar su cumplimiento que la Cámara de Representantes, de mayoría demócrata, introdujo con éxito en la Ley de Implementación.